Tuesday, February 05, 2013

Rearmando la esperanza

Rearmando la esperanza

Venían del barrio
      no necesitaron buscar a los de abajo
                        porque eran de allí mismo
para bien
          y para mal
llevaban la marca en el orillo

No se disfrazaron de nada
                           en el carnaval
                           de la vida jodida
más bien se plantaron
desde sus propias fuerzas
                        y experiencias compartidas
y desde allí aprendieron
          entre tantas otras cosas
                     buenas o no tanto
que si no metían pechera
los pisoteaba el desfile
                  de los profesionales
                  en eso de revolear tramperas
                  y palos de arrear
para seguir tumbando
                 y encerrando           
                            en la noria infeliz

No había que ser una luz
          para rebelarse
              ante tanta obscuridad
No fumaban bajo el agua
         pero entendian pronto y claro
que no había que tropezar siempre
                          con la misma piedra

No vendían buzones
ni los compraban
amaban la vida
y la alegría
y sin embargo
hubo un día
en que a la vuelta
de una esquina cualquiera
              toparon con la injusticia
              y sus peores concesionarios
pegando duro
los golpes bajos
desparramando castigo                                         
imponiendo todas sus miserias
                          a los mismos de siempre  
Era imposible gambetear
               al monstruosario desatado
las bestias con chapa de institución
que ensangrentaban
fábricas, barrios, escuelas,
nuestras gentes
           campo afuera
                   asfalto adentro
decretando la obscuridad
la muerte
el saqueo
los negocios sucios
la inmundicia como sociedad
un destino de ganado
condenado de antemano  

Desde entonces
-como hicieron otros antes-
se prendieron a la mejor nostalgia
la de esa ausencia que apasiona
porque sigue por llegar
aquella del futuro sin mal
que será creación
        por nacer sin haber sido antes
        vivencia empecinada
        contra viento y marea
idea fuerza,
madre paridora
      siempre nueva
           a pesar que viene de lejos  

Y así fue
que buscando la justa
de cuestión en cuestión
fueron comprendiendo más y mejor
          y asumiendo lo que entendían
porque además de palabras
tenían corazón y ganas      

Y se hicieron cargo,
declarandose herederos
de todas las ilusiones hechas pedazos
de los sueños que siempre preguntan
y las respuestas empecinadas
que alientan la existencia
para que el mundo ya no sea una porquería

Por eso
desde el aquí y ahora de cada quien
se juntan para ocupar sus propios lugares
construyen a pulso
              cruces de caminos
para encontrarse
              mano a mano
juntando los pedacitos queridos
             que rearmen la esperanza
al sol -o como se pueda-
pero siempre por fuera de las gusaneras
de las que nunca naceran mariposas
ni primaveras

Que nadie lo ponga en duda
ahí están
       nuestras gentes compañeras
       porque sí, se la creyeron                           
y la seguirán
         seguramente la seguirán
         cueste lo que cueste
haciendo lo debido
y no cualquier cosa
porque sus hermanas y hermanos
            -aún quienes la sufren en silencio-
siguen sangrando
por las mismas heridas.